La introducción de cobots en líneas de producción permite no solo optimizar tiempos de trabajo.
Cobot en la línea de empaque de jamones en COVAP (Andalucía, España)
En el caso de tareas de “pick and place” repetitivas se busca tanto recoger un producto y colocarlo de una forma rápida, precisa y eficiente, como así también evitar errores y prevenir el desperdicio de material. Independientemente de la industria que se trate (automotriz, alimenticia, agrícola, farmacéutica, mobiliaria, etc), el denominador común que se persigue en todos los casos es conseguir una mayor y mejor calidad del producto final.
Uno de los rasgos que se pondera para utilizar un brazo robótico colaborativo en tareas de recogida y colocación de productos incluye la ejecución de la tarea en forma autónoma, sin ayuda humana directa. Esa configuración habilita que el o los empleados puedan destinarse a tareas más productivas, o aquellas en donde la intervención humana genera mayor valor agregado, teniendo en cuenta que existen muchos aspectos no automatizables que requieren de mano de obra intensiva. Otra ventaja adicional de este tipo de cobots es que por su diseño compacto puede instalarse en entornos de trabajo con espacio reducido.
Mirá a un cobot en acción ejecutando tareas de pick and place:
Algunas consideraciones a tener en cuenta para una implementación incluyen la carga útil que debe manejar el cobot, el radio de acción necesario dentro de la línea de producción y el tipo o sistema de agarre robótico. En este último caso, se habla de efectores finales que imiten, en mayor o menor medida, la destreza, habilidad y precisión de la mano humana. Dicho aspecto permitirá un manejo adaptado de tareas y objetos de diferentes tamaños, peso y forma. Asimismo, las soluciones más sofisticadas integran el trabajo del brazo robótico con sistemas de visión que facilitan la velocidad, la precisión y la orientación en 2D y 3D. Un rasgo no menor es que el robot permita operar con seguridad teniendo en cuenta la proximidad de trabajadores.
Si se tiene en cuenta el vasto campo aún inexplorado en Argentina, el desarrollo de tecnología y aplicaciones hoy son accesibles y están al alcance de la mano para todos: desde ingenieros, técnicos, programadores, desarrolladores hasta estudiantes y aficionados.
En la actualidad, gracias a la IOT (Internet of Things) y la disponibilidad de productos y servicios, como así también la posibilidad de capacitación y la facilidad para conseguir componentes electrónicos, encarar un desarrollo no es ciencia ficción y explorar fronteras es posible. En Microelectrónica Componentes podés encontrar todo lo que necesitás para hacerlo: insumos, asesoramiento, atención personalizada y capacitación constante. Entrá en nuestra web y descubrí un mundo de posibilidad.
